Caminar hacia la nada y el todo, la luz y las sombras. Cada camino que he tomado en mi vida obligado o voluntario ha marcado mi carácter y forjado la persona que soy.
Caminar implica un cambio, un acercamiento a lo desconocido; una vez has recorrido el camino no hay retorno al pasado. Cada nueva experiencia marcará y moldeará nuestra vida y así, nuestro futuro. Caminar, como vivir, es puro aprendizaje. El camino es la vida y la vida el camino.
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